Classic Novel
Capítulo 9
Capítulo 9
-¿Oh? ¿Esta joven quiere participar en la apuesta?
Tyson vio a una joven de belleza etérea levantar su cartel y sus ojos se iluminaron de inmediato, mandando a alguien a invitarla de inmediato.
Los invitados en el lugar vieron a Nerea levantar el cartel y también se sorprendieron
-¿Nerea Carris? ¿Cómo es que va a participar en la apuesta?
-¿Qué sabrá de apuestas una chica tan joven? ¡Probablemente solo quiere aprovechar la oportunidad para llamar la atención delante de todos!
-Esa atención no va a salir barata, eh. La apuesta minima de Tyson empieza en 5 millones, no es algo que cualquiera pueda permitirse…
-Exacto, si logra cortar algo de gema sería tener suerte, pero si no, es solo una piedra inútil y habrá desperdiciado millones en vano.
-Hace tiempo que escuché que la familia Carris tiene una joya de la corona, tratada como un tesoro por toda la familia. Hoy al verla, puedo decir que es cierto, permitiendo incluso este capricho y además con dos hermanos para protegerla.
Los dos hermanos protectores se llevaban las manos a la cabeza con preocupación, maldiciendo en silencio que Nerea los iba a sacar un buen dinero, pero mientras ella se divirtiera, el dinero era lo de
menos.
Cuando Nerea pasó por el equipo de evaluación de piedras de Grupo Dazz, vio a Roman, quien claramente tampoco esperaba que ella participara en la apuesta. Un brillo fugaz pasó por sus profundos ojos oscuros.
Ella sonrió levemente hacia él, una sonrisa que parecía tanto un desafio como una provocación, tan deslumbrante que mareaba.
La participación de Nerea en la apuesta fue solo un breve interludio, y pronto, todos volvieron a centrar su atención en los dos equipos profesionales de evaluación de piedras, aunque una mirada profunda seguía fijándose en ella.
Dado el misterio y la incertidumbre de apostar por piedras, a lo largo de los años, el círculo no había encontrado un método de evaluación confiable, dependiendo solo del color de la piedra, la forma y las pequeñas fisuras para hacer evaluaciones, donde la suerte jugaba un gran papel.
El asistente del lugar pensó que Nerea o tenía algún conocimiento sobre la evaluación de piedras o simplemente estaba eligiendo piedras basándose en conjeturas y suerte. Sin embargo, cuando entró, pidió inmediatamente que se abriera la cubierta de vidrio de una piedra.
Disculpe, señorita, pero de acuerdo con las reglas del concurso, no puede tocar directamente la piedra.
Nerea: -No la tocaré, solo quiero olerla, ¿tampoco se permite eso?
¿Oler?
El asistente, que había estado en el negocio de las piedras por años, nunca había oído tal petición. extraña. Después de todo, era solo una piedra, ¿qué podría oler? Pero olerla realmente no rompía ninguna regla, así que abrió la cubierta de vidrio.
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Nerea cerró los ojos, se acercó y olfateó levemente.
Carbonato de calcio, silicato de sodio, una mezcla de dióxido de silicio; es solo una piedra común.
Desde muy joven, descubrió que su sentido del olfato era especial, capaz de detectar olores que la gente común no podía, pero nunca supo cómo expresarlo.
No fue hasta que tomó clases de química en la secundaria que entendió que esos olores eran componentes químicos muy sutiles de los objetos.
que estaba
Orgullosa, le contó a otros, pero al escucharlo, o la llamaban bicho raro o pensaban que bromeando. Nunca imaginó que esta habilidad sería útil en el Gran Torneo de Piedras Preciosas de hoy. -Bien, la siguiente, por favor.
¿Solo olió y ya quiere la siguiente?
El asistente estaba lleno de dudas, pero abrió la siguiente.
Nerea olió varias piedras, todas comunes, con un par que apenas contenían gema de calidad mediocre. Justo cuando empezaba a sospechar que esto era una estafa de Tyson, se detuvo ante la piedra más pequeña y común de todas.
¿Esto es… un auténtico olor a esmeralda?
El asistente estaba a punto de cerrar la cubierta cuando ella lo detuvo.
-¡Espera!
Se acercó dudosa y olió de nuevo, el aroma puro y rico de la piedra preciosa llenó sus sentidos.
Nerea no podía creer lo que sus narices le decían al ver esa piedra común, finalmente comprendiendo lo complicado y lo difícil de esa actividad de evaluar las piedras.
¿Quién iba a imaginar que esta piedra, tan común que si se dejara en la calle nadie se interesaria, escondía una gema tan rara que ni siquiera podía nombrar?
-¡Elijo ésta!
¿Ésta?
El asistente la miró como si estuviera viendo a alguien hacer el ridiculo.
Mirando a su alrededor, cada roca parecía ser mejor que la última, mas parecida a una gema, y es que los dos equipos profesionales que pasaron antes ni siquiera le habían echado un vistazo a esta.
¡Ella quería gastar cinco millones en lo que parecia ser un pedazo de roca inútil, definitivamente era una novata en todo el sentido de la palabra!
-Señorita, ¿estás segura de esto?
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Justo cuando Nerea cerró el trato con un golpe de martillo, los dos equipos profesionales de Grupo Dazz anunciaron que ya habían elegido la piedra para la competencia de apuesta.
Tyson, liderando un equipo de expertos evaluadores de primer nivel, se dirigió al centro del salón para comenzar la gran ceremonia de corte de piedra.
En ese momento, todos en la sala contuvieron la respiración, observando esta escena tensa y
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emocionante.
Primero fue el turno del equipo de Roman, un experto colocó la piedra apostada en la máquina de corte de precisión, y con un solo corte, apareció ante todos una esmeralda imperial de textura fina y excelente calidad, lo que provocó una ola de aplausos y ovaciones en el salón.
-¡Increible, han cortado una esmeralda de la más alta calidad! Esa suerte, Roman realmente es el favorito del cielo, el escogido entre los hombres. ¡El sucesor de la Torre Gemela de Dazz no podría ser otro más que él!
-Es realmente revelador, antes pensaba que las apuestas en piedra eran solo estafas, nunca imaginé que realmente se pudiera sacar una esmeralda de valor incalculable.
-Con una esmeralda imperial ya revelada, su significado y valor son bastante claros. Supongo que no hay necesidad de seguir comparando, por suerte aposté por Roman, jesta vez no puedo perder!
El lugar estaba lleno de murmullos y Tyson también felicitó a Roman, pero Octavio no parecía preocupado en lo más minimo, con un gesto de su mano, ordenó que trajeran la piedra de apuesta de su equipo.
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